El rol del canal Damrak: Comercio
Durante el siglo mencionado, Ámsterdam tuvo la posibilidad de generar su auge económico, por lo que se construyeron distintos canales, con distintos usos y funciones. El Damrak era un canal con un rol portuario y funcional, único y estratégicamente “ubicado”, ya que era el principal punto de acceso a la ciudad desde el mar por su cercanía, y que a su vez, conectaba la entrada de la ciudad con la plaza más concurrida de la ciudad, la plaza Dam.
En la plaza Dam, podemos ver como los vacíos o espacios públicos de gran escala de la ciudad de esta zona son importantes para la reunión de la sociedad y el comercio. Donde se genera un punto de encuentro de una manera organizada, ya que si alguien precisaba algo sabía claramente a donde tenían que ir.
El ancho de este es de los más grandes, ya que el mismo vinculaba el comercio y el mundo. No solo había una circulación interna, sino de grandes masas. Los barcos y las personas circulaban por el mismo, para descargar las mercancias y hacer negocios, muy accesible y comodamente. Braudel lo definió como la “arteria principal de comercio”.
“Las mercancías, apenas desembarcadas, encontraban en Ámsterdam —y especialmente en torno a su Bolsa— un sistema completo de manejo comercial: mercados, almacenes, oficinas de seguros, y subastas. Todo ello sostenido por una ciudad-puerto que había transformado su red de canales en una máquina logística incomparable.”
— Braudel, F. (1984). Civilización material, economía y capitalismo. Siglos XV–XVIII. Vol. II: Los juegos del intercambio (trad. R. A. Arocena). Madrid: Alianza Editorial.
Al aprovechar la vía marítima cercana que presentaba Ámsterdam, esta planificación y análisis de la sociedad en necesidad de un crecimiento económico, teniendo como solución la ampliación del comercio al exterior, es que la ciudad fue exitosa en esos siglos. Esta zona es la que generó la riqueza e importancia de la ciudad. Así pudiendo invertir en nuevos espacios y arquitectura, como lo fue la Bolsa de Ámsterdam.


